En este espacio en el que solucionamos las cuestiones recurrentes similares con la sexualidad, vamos a emprender el tema de los distintos complementos que hay para la vida erótica. Son lo que generalmente se conoce como juguetes eróticos y otros elementos para el exitación, que se alcanzan en los sex shop o tiendas eróticas tanto físicas como en línea.
Estos atrayentes artículos se están haciendo conocido y difundiendo poco a poco más de forma masiva debido a que son de diseños mucho más afables, la información sobre su empleo es mucho más alcanzable y asimismo es viable lograrlos por medios virtuales.
Observemos entonces ciertas cuestiones usuales que nos llega en nuestros distintas canales de comunicación con relación a los juguetes eróticos.
¿Los juguetes eróticos son únicamente para parejas que tienen inconvenientes en la privacidad?
No siempre.
Es bastante recurrente percibir el término consolador en referencia a un vibrador o a un dildo, de lo que se deduce que su empleo es con el propósito de consolar a alguien, esto es darle una satisfacción substituta en lugar de la que no se le puede ofrecer por medios naturales (por poner un ejemplo un pene recio).
En este sentido vale indicar que es común conseguir una actitud competitiva de los hombres hacia estos elementos. Varios sienten su virilidad herida al meditar que si se precisan es por el hecho de que su pene no es bastante (por dimensiones o desempeño) para agradar a su pareja. No obstante, lo que permiten los juguetes eróticos es entrar a experiencias distintas, como por poner un ejemplo las vibraciones, por consiguiente no son una rivalidad sino más bien un complemento en la escena erótica.
¿Qué géneros de juguetes eróticos hay?
Los mas populares son los dildos y los vibradores. La diferencia primordial entre los dos es que los primeros no vibran.
De entrada los dildos son de formas fálicas y están diseñados para la penetración vaginal o anal, pero de todas formas las reglas sobre su utilización las crea cada pareja según sus fantasías.
En la situacion de los vibradores, la tecnología tuvo un enorme avance y los podemos encontrar de muchas formas, tallas, materiales y colores. Más allá de que tienen la posibilidad de usarse para la penetración, la mayoría de las mujeres los creen mejores para la estimulación de clítoris y pezones. A propósito, asimismo hay los vibradores para hombres. Son unos masturbadores con forma de tubo, y los mucho más avanzados no solo vibran sino asimismo generan presión y succión sobre el pene.
El género de vibrador mucho más habitual -por su bajo valor y simple ingreso puesto que está hasta en las tiendas- es el que tiene forma de anillo. Se pone en la base del pene y en la parte de arriba tiene un tubo con una bola metálica que vibra. Así cumple 2 funcionalidades: genera una oclusión venosa artificial facilitando el cuidado de una erección recia, y al unísono impulsa el clítoris con vibraciones en todos y cada penetración profunda. Recomendación esencial: no usarlo mucho más de treinta minutos contínuos, podría dañar los tejidos del pene.
Otra alternativa bien interesante son las bolas chinas. Tienen la posibilidad de estar fabricadas de materiales suaves como la silicona o mucho más duros como el metal, y están compuestas por una a seis esferas unidas por un cordel o plástico maleable. Para utilizarlas, se introducen delicadamente y después se quitan sutilmente, siempre y en todo momento usando abundante lubricante. Ciertas mujeres las emplean para entrenar los ejercicios de Kegel, de provecho muy reconocidos para la salud sexual.
Contamos asimismo múltiples géneros de lubrificantes, que más allá de que no son en sí juguetes eróticos forman un óptimo complemento para su utilización. Son indicados para el coito en el momento en que la pareja quiere una mejor lubricación, y en un caso así se aconsejan los lubrificantes hidrosolubles puesto que en contraste a los oleosos (como aceites y vaselina líquida) no dañan el látex de los preservativos y no irritan los genitales. En lo que sería la cosmética erótica disponemos diversos tipos de intensificadores que causan experiencias de frío, calor, picor, y asimismo traen diferentes aromas y sabores. Son destacables para masajes en todo el cuerpo, el estímulo de zonas erógenas concretas y para la práctica del sexo oral.
Siguiendo con el paseo por estas elecciones para el exitación podemos encontrar disfraces y lencería erótica que asisten a la práctica de juegos de permisos, cumpliendo distintas fantasías y estimulando el sentido de la visión, la imaginación y la imaginación. Una manera mucho más que válida de mentir a nuestro rutinario cerebro.
¿Cuáles son los juguetes eróticos mucho más noticiosos?
Lo cierto es que la tecnología nos llama la atención poco a poco más. En la actualidad podemos encontrar múltiples fabricantes de juguetes eróticos que se manejan con el teléfono celular de hecho por tecnología bluetooth y wi-fi, dando permiso la interacción erótica a gran distancia. Hasta se tienen la posibilidad de complementar con videollamadas usando lentes de situación virtual y sensores que impulsan los genitales.
Los estimuladores de clítoris muestran muchas variaciones muy excitantes y son novedosas elecciones para el exitación femenino. Están los que imitan al sexo oral con lenguas que van virando a distintas velocidades (como los de la marca Sqweel), los que generan un efecto de succión y los que vibran al compás de la música o de los gemidos.
Los masturbadores masculinos son de empleo poco a poco más común en USA, Europa y América Latina. Los huevos de gel, los tubos que simulan las experiencias vaginales y los vibradores para hombres dejan una autoestimulación muy agradable, así sea en soledad o en pareja.
¿Qué empleo terapéutico podrían tener los juguetes eróticos?
Los vibradores resultan especialmente prácticos en el momento de hacer más simple el orgasmo en mujeres que precisan un nivel de estimulación que no les da la penetración vaginal, las caricias en sus genitales ni el sexo oral. En estas situaciones son aconsejables vibradores pequeños y que se manejen con sencillez, de empleo de afuera y que tengan diferentes velocidades. Así se puede cambiar la agilidad y conjuntar su empleo con el coito vaginal (lo que es posible en ciertas posiciones coitales por servirnos de un ejemplo la mujer encima de su pareja). Es conveniente que en un primer acercamiento la mujer utilice el vibrador ella sola, y vaya estudiando con tranquilidad de qué forma logra las experiencias mucho más próximas al orgasmo. En el momento en que identifica las experiencias mucho más excitantes es buen instante para comunicar su experiencia en pareja.
En la situacion de los hombres, los masturbadores causan experiencias muy realistas y son indicados para el régimen de la eyaculación precoz. En primera instancia el hombre aprende a regular su excitación sexual usando su mano o la de su pareja, pero por norma general los pacientes aprecian gran diferencia de estimulación sexual entre la mano y la vagina. De ahí que, los masturbadores serían un peldaño intermedio o una transición atrayente que deja un control mucho más complejo y prepara mejor para el instante de la penetración vaginal o anal.
¿Posiblemente un individuo sea adepta a los juguetes eróticos?
Muchas mujeres consiguen el orgasmo únicamente con el estímulo vibratorio, y esto no es una adicción ni una nosología. Lo esencial, al final de cuenta, es su satisfacción y la de su pareja mucho más que los medios que empleen para lograr el orgasmo.
En forma de conclusión, los sexólogos clínicos aconsejamos poco a poco más la utilización de los juguetes eróticos a fin de que las parejas superen la monotonía, desarrollen su imaginación erótica y asimismo como complemento de las terapias sexuales. Aguardamos que desde esta lectura se animen a examinar estas atrayentes elecciones para continuar incrementando su satisfacción sexual.
Redactado para Boston Medical Group por Ezequiel López Peralta.
Sicólogo. Máster de Sexología Clínica y Terapia de Parejas.
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